Durante este período del año, las ceremonias de matrimonio en las cuales se realizan los deseos más costosos de los futuros esposos se multiplican, y se multiplica el deseo de la construcción de una casa en un ambiente musulmán y feliz, en la cual encontrar un buen refugio, el descanso psicológico y la felicidad.
Así pues, una generación piadosa y única vivirá y crecerá en esta casa bajo la protección de un buen padre y de una dulce madre.
¿Cuáles son las particularidades de una casa musulmana? ¿Cuál es el camino correcto a seguir? ¿Y cómo puede encontrarse la felicidad?
Allah subhana wa ta’ala (Glorificado y Exaltado sea) dijo:
"Entre sus señales os he creado a partir de ustedes mismos a vuestras esposas para que encontréis en ellas la calma y en vuestros hogares establezcáis entre ustedes vínculos de ternura y misericordia. Y meditad sobre esto".
"Entre sus señales os he creado a partir de ustedes mismos a vuestras esposas para que encontréis en ellas la calma y en vuestros hogares establezcáis entre ustedes vínculos de ternura y misericordia. Y meditad sobre esto".
Ibn Kathir dijo: “La vivienda musulmana es un lugar en el que ambos esposos son responsables; son la base de su construcción y sus pilares, y la vía que seguirá la casa dependerá de ellos”.
Si siguen las órdenes de Allah, Sus palabras y Sus actos, si temen a Allah en público y en secreto, y si tienen buenas cualidades y un buen comportamiento, la luz entrará en esta casa, las virtudes se propagarán allí, e iluminará la vida de la gente, para hacerse el punto de partida de la construcción de una generación piadosa, de una sociedad generosa, de una gran comunidad y de una civilización elevada.
El mensajero de Allah, sallallahu allayhi wasallam (la paz y las bendiciones de Allah sean con él), dijo:
“Vosotros formáis una fortaleza en la religión, y cada uno de vosotras está de pie sobre un camino que lleva a esta fortaleza para que los enemigos no entren allí. Sois guardianes de la fortaleza; el jefe es el hombre, y su obediencia es obligatoria.”
El mensajero de Allah, sallallahu allayhi wasallam, también dijo:
“Vosotros sois todos los pastores de vuestro hogar y sois totalmente responsables de vuestro rebaño.”
Y Muhammad, sallallahu allayhi wasallam, dijo:
“Y la mujer es una pastora en la casa de su marido y es responsable de su rebaño”.
(Transmitido por Al Bukhari)
La casa del Profeta, sallallahu allayhi wasallam, y las que se encontraban allí de entre las madres de los creyentes, son el modelo de todas las casas que se encuentran sobre la tierra; son casas sencillas que se desprenden del lujo, y que están siempre en la invocación de Allah y en la lectura del Corán, y dio el mejor ejemplo de la renuncia al mundo de la satisfacción.
El mensajero de Allah, sallallahu allayhi wasallam, les dio la elección a sus mujeres sin limitación después de haberles preparado para una vida ejemplar; Allah hizo bajar un ayah (versículo) en el cual pidió a las esposas del Profeta, sallallahu allayhi wasallam, escoger entre la vida de este mundo y Allah, su mensajero y el otro mundo; Allah (subhana wa ta’ala) dijo:
“Oh Muhammad! Dile a tus esposas: “si vosotras queréis una vida terrenal y sus lujos, dadle su derecho al divorcio y devolvedle la libertad amablemente. Y si amáis a Allah y le teméis, a Su mensajero y la última morada (el Paraíso), Allah preparó para los que hacéis el bien una gran recompensa.”
Aisha y todas sus esposas, radiyallahu anhuma (que Allah esté satisfecho con ellas), dijeron: "Nosotras escogimos a Allah, su mensajero y la otra vida."
Esto no significa que el Islam apela a la pobreza o que el Paraíso impide sacar provecho de los bienes de esta vida, sino que hay que seguir el mejor ejemplo y el más elevado en el Islam.
La casa musulmana de la primera generación hizo del Islam su camino con las palabras y los actos, cumplieron su vida con la luz de la fe; adquirieron cualidades del Corán; pues, modelos islámicos únicos salieron de estas casas…
Las casas musulmanas eran así cuando fueron construidas teniendo como base la fe y el camino correcto, y eran alumbradas por la luz del Corán.
La casa musulmana pura y piadosa es una protección contra la perversión; el Profeta, sallallahu allayhi wasallam, dijo:
“Cada niño nace sobre su estado natural (el Islam); sus parientes entonces le hacen judío,cristiano o de cualquier desviación...”
(Transmitido por Al-Bukhari)
Ibn Al-Quayim dijo:
"La inmensa mayoría de los jóvenes son inculcados al desvío a causa de sus parientes y la negligencia hacia ellos, y a causa del abandono de la enseñanza de las obligaciones de la religión y de la Sunnah (ejemplo del Profeta, sallallahu allayhi wasallam); descuidaron su educación cuando eran niños; pues, ellos mismos no hicieron bien, y no los enseñaron el buen camino cuando crecieron".
¡Qué mejor comportamiento que los mayores de la familia, reúnan a sus niños y les reciten el Corán, les lea la vida de los profetas e implanten en sus comportamientos los buenos modales!
Lo más importante para un correcto hogar musulmán y el mejor servicio que puede devolver a la sociedad son: la educación de los niños y la formación de una generación piadosa y correcta.
Pero la educación no tiene ningún valor y los consejos no tienen ningún efecto si los parientes no son un buen modelo y un buen ejemplo en cuanto a la adoración, las buenas calidades, las palabras y las buenas acciones.
Allah subhana wa ta’ala dijo:
“Ordénale a tu familia practicar la oración y ten paciencia en su práctica.”
Cuando la casa musulmana no sigue el camino correcto, la perversión se difunde, la droga se propaga, y la tasa de criminalidad aumenta entre los niños y de los adolescentes.
La casa que no implanta la fe en los corazones y que no sigue el camino del Corán, da origen a individuos que tienen problemas psicológicos, el espíritu turbado y las malas costumbres. El hecho de que ciertos niños no obedezcan a sus parientes, que los informes sean malos entre los jóvenes, así como el abandono de la responsabilidad, el desvío y el alejamiento de Allah, y la rebelión contra los valores morales y los principios que tocan a ciertos niños de esta comunidad, son el resultado inevitable de una casa que olvidó la purificación del alma, que descuidó la educación, y los parientes no son buen ejemplo para sus niños.
La casa que abandona las enseñanzas del Islam, que toma lo que desea y deja lo que no quiere, para imitar la vida de los incrédulos, da origen a modelos de hombres débiles que no conseguirán elevar la comunidad para que alcance su sitio en el Paraíso.
La vida de la casa musulmana, su felicidad, su alegría y su felicidad están en la invocación de Allah; según Abu Mussa, radiyallahu anhu (que Allah esté complacido con él), el mensajero de Allah, sallallahu allayhi wasallam (la paz y las bendiciones sean con él) dijo:
"El ejemplo de la casa en la cual Allah es invocado y en la que Allah no es invocado es como la vida y la muerte."
Según Abu Huraira, radiyallahu anhu, el Profeta, sallallahu allayhi wasallam, dijo:
"No hagan de sus casas cementerios; el diablo huye de la casa en la cual la sura Al-baqarah es leída."
Algunos ahadith (narraciones) muestran que es recomendado hacer revivir las casas de los musulmanes y de iluminarlas con la invocación de Allah como "La ilaha illa Allah (No hay más dios que Allah)", "Subhanallah (Glorificado sea Allah)", y otras invocaciones; …aumentando…las oraciones supererogatorias. Y si no hay oración e invocación de Allah en las casas, estarán como cementerios y ruinas, aunque sean como grandes castillos.
Sin la invocación de Allah y el Corán, las casas son oscuras y un hogar para los diablos, sus habitantes tienen corazones muertos aunque sus cuerpos son vivos.
Entre las particularidades de la casa musulmana, está el hecho de que sus miembros se ayudan mutuamente en la obediencia de Allah y la adoración. La mujer fortifica la debilidad de la fe del hombre y el hombre corrige los malos comportamientos de su esposa, completándose ambos, aconsejándose y ayudándose. Aisha, radiyallahu anha (que Allah esté complacido con ella), dijo:
El mensajero de Allah rezaba por la noche, luego después de haber terminado "Al-Witr", decía: "Levántate y reza "Al-Witr", ¡oh Aisha!
(Transmitido por Muslim)
Y el Profeta, sallallahu allayhi wasallam, dijo también:
"Que Allah tenga misericordia por un hombre que se despertó por la noche para rezar y despertó su mujer para que rece; y si no quiere, moja su cara con agua; y que Allah tenga misericordia de una mujer que se despertó por la noche para rezar y despertó su marido, y si no quiere, moja su cara con agua."
(Trasmitido por Abou Dawoud según el hadith de Abu Huraira)
Estos dos ahadith (narraciones) muestran que el hombre y la mujer tienen cada uno un papel que deben llevar a cabo para la corrección de la otra y para incitarle a la obediencia de Allah subhana wa ta’ala (Glorificado y Exaltado sea); la relación entre ellos es una relación de fe en la cual ambos se ayudan mutuamente para la obediencia de Allah. Pues, si uno de ellos se debilita, el otro le ayuda.
La casa musulmana debe ser construida sobre la correcta educación, una educación que guía hacia el camino correcto, y que muestra los caminos del infierno; la educación de la cortesía, de la limpieza, las reglas de la oración, del modo de pedir el permiso entrar, de lo lícito y de lo ilícito...
La familia no debe ignorar las enseñanzas de la religión, deben enterarse pues de la educación según la shariah (ley islámica), la legislación islámica en una asamblea de ciencia; Allah subhana wa ta’ala dijo:
“¡Oh creyentes! Refúgiense del calor del infierno.”
Esto muestra que hay que enseñarles a los miembros de la familia la educación, prescribirles el bien y prohibirles el dolor, algunos sabios dijeron: "Enséñeles la sunnah (ejemplo del Profeta, sallallahu allayhi wasallam) y deles una buena educación." Y al Quourtoubi, dijo: "Debemos enseñarles a nuestros niños y nuestras familias la religión y el bien, y el correcto comportamiento."
Entre las particularidades de la casa musulmana, está el pudor; con el cual la casa es protegida del dolor.
No es conveniente que una casa construida sobre las bases de la piedad abandone su protección, abandone su pudor, y mancha su entorno con lo que les denigra el pudor, como las películas que muestran la desnudez, las canciones, el abandono del velo, y la semejanza a los enemigos de la religión; esto está como un microbio en la construcción de la casa, abre las puertas del dolor y destruye a los miembros de la familia.
Entre las particularidades de la casa musulmana, está el hecho de que sus secretos sean protegidos y sus desacuerdos sean guardados dentro de la casa; el Profeta, sallallahu allayhi wasallam, dijo:
"Entre las peores personas del día del Juicio estarán los hombres que descubren los secretos de alcoba."
(Trasmitido por Muslim)
Aquel cuya religión no es satisfactoria, no debe entrar en la casa musulmana, porque la entrada del corruptor es una corrupción, introducir a aquel del que nos no fiamos es un peligro para todos. Además, son las causas de la destrucción de una casa…feliz.
La casa musulmana se vuelve más firme cuando los miembros de la familia se ayudan mutuamente en los trabajos de la casa; y tenemos en la persona del mensajero de Allah, sallallahu allayhi wasallam, el mejor ejemplo; cuando Aisha, radiyallahu anha, fue preguntada sobre lo que el mensajero de Allah hacía en su casa, a lo que respondió:
"Era un hombre como otros; limpiaba sus trajes, ordeñaba su oveja, y cumplía sus asuntos.” (Transmitido por Ahmed)
Y en otra versión:
"Estaba al servicio de su familia, y cuando llegaba la hora de la oración, salía para cumplirla."
(Transmitido por Al-Bukhari)
Si somos interrogados sobre qué deseábamos en este mundo, nuestro deseo más grande sería vivir en la felicidad, y que en nuestros hogares tengamos felicidad.
Esta felicidad en la casa musulmana no se encuentra teniendo una casa lujosa, muebles lujosos, y trajes lujosos; esto es una mala comprensión de la felicidad.
La felicidad se tiene cuando ambos esposos temen a Allah en secreto y en público; se tiene cuando ambos esposos consideran el matrimonio como un acercamiento hacia Allah, y se obtiene la felicidad cumpliendo sus deberes conyugales con sinceridad y perfección.
Así, con esta comprensión, los miembros de la casa musulmana feliz cumplirán las oraciones y leerán el Corán, vivirán en el amor y la concordia, los niños piadosos serán el placer de los ojos de los parientes, y una fuente del bien para ellos en este mundo y en el otro; Allah subhana wa ta’ala dijo:
"Quienquiera que hizo una buena obra, sea hombre o mujer, siendo creyente, obtendrá su recompensa tanto en esta vida como en la otra y tendrá beneficio por todo ello."
Fuente:
Artículo "Las Particularidades de un Hogar Correcto"
Autor:Sheik Abdel-Bari At-Thoubéiti
Origen:
Traducción del francés al español por:
Leila Al Sebtawia
Publicado en español en:
