5 oct 2011

Orgullosa de ser Musulmana


¡Qué te preguntan por qué te cubres la cabeza!
¡Qué te preguntan si eres árabe!
¡Qué te confunden con una monja o hasta con una hindú!
¡Qué te dicen que ya no estás en Arabia, qué te vistas “normal”!
¡Qué te dicen que aquí eres “libre”, qué no te tienes que cubrir!
¡Qué se te quedan mirando en la calle con mala cara o con ojos de sorpresa!
¡Qué te insultan!
¡Qué te gritan: “Regrésate a tu país” estando en tu propio país!
¡Qué te quieren salvar de esa “opresión” que vives imponiendo leyes que te obligan a descubrir tu cuerpo!
¡Qué no te dejan estudiar ni trabajar cubierta porque estamos en un país “laico”!
¡Qué no puedes rezar ni en las antiguas mezquitas porque ahora son patrimonio turístico!
¡Qué te dicen: “exagerada”, “extremista”, “fanática” o hasta “terrorista”!
¡Qué te dicen que te han lavado el cerebro!
¡Qué le echan la culpa a tu esposo de que seas ahora musulmana!
¡Qué han llegado hasta a escupirte o agredirte físicamente en la calle!
Sí hermana, es verdad que como nueva musulmana empezamos a vivir muchas de estas situaciones casi a diario, son difíciles pero no imposibles de sobrellevar, como dicen: “Lo que no te mata, sólo te hace más fuerte”.  No permitas que estas situaciones maten tu iman (fe), tu iman no se alimenta de lo que la gente piense o diga, recuerda que para entrar al Islam usaste tu razón y Allah guió tu corazón, ser musulmana fue una decisión que tomaste muy consciente de por qué lo hacías y fue una bendición de Allah.  Al conocer el Islam, aprendiste que la fe no es ciega ni ignorante, sino que por el contrario, la fe de un musulmán o de una musulmana está basada en el uso de la razón y el corazón.  Son tantos los signos que viste, tanta la lógica que encontraste, que no te quedó duda alguna para reconocer que éste es el camino verdadero.  No solamente tú, sino también grandes científicos llegaron a admitir el origen divino del Corán, ¡Sí!, ¡científicos!, las personas más escépticas de la Tierra, al conocer el Islam simplemente no pudieron negar su veracidad.
Así que, hermana, no te dejes llevar por lo que diga o haga la gente y los gobiernos en contra del Islam y los musulmanes, ¿de qué sientes vergüenza?, ¿de estar siguiendo la única religión que te dio respuesta a esas preguntas que nadie te supo antes contestar satisfactoriamente?, ¿de estar siguiendo la única religión donde encontraste sentido, lógica y pertenencia?.
No hermana, no dejes que el Shaytán (Satanás) cambie tu percepción de las cosas que tú sabes claramente cómo son en realidad, vivimos en un mundo donde lo malo es considerado “bueno” y lo bueno es visto como “malo”, donde la obediencia a los seres humanos ha sido antepuesta a la obediencia a Dios, donde las personas pasan más tiempo trabajando, viendo televisión, yendo a fiestas y casi nada de tiempo en adorar y recordar a Dios.  Este es el mundo en que vivimos, como se narra en el hadiz:
El Mensajero de Allah, sallallahu allayhi wasallam (la paz y las bendiciones de Allah sean con él), dijo: “este mundo es una cárcel para el creyente y un paraíso para el no creyente”
(Transmitido por Muslim)
Recordemos que estas grandes pruebas que pasamos por la causa de Allah tendrán su recompensa y esa recompensa durará toda la eternidad inshallah (Si Allah quiere), a diferencia de la vida de este mundo que sólo tiene un tiempo muy limitado, como dice Allah en el Corán lo que traducido significa:
“La vida de acá es como agua que hacemos bajar del cielo. Las plantas de la tierra se empapan de ella y alimentan a los hombres y a los rebaños, hasta que, cuando la tierra se ha adornado y engalanado, y creen los hombres que ya la dominan, llega a ella Nuestra orden, de noche o de día, y la dejamos cual rastrojo, como si, la víspera, no hubiera estado floreciente...”
Surah Yunus 10 Ayah 24
Hermana mía, esto que escribo son experiencias que tanto tú como yo hemos vivido en más de una ocasión, no estás sola en esta situación, así como tú y yo hay muchas musulmanas más alrededor de todo el mundo que pasan por cosas tan o más difíciles que las nuestras, pero Allah prueba a cada quien en la medida de su capacidad no le pide a nadie más allá de lo que realmente puede soportar:
“Allah no pide nada a nadie más allá de sus posibilidades…¡Señor! ¡No nos impongas más allá de nuestras fuerzas!...”
Surah Al Baqarah Ayah 286 
Digamos: “Alhamdulillah (Gracias a Allah)” por todo lo bueno e incluso por todo lo malo, lo bueno porque nos enseña a ser agradecidas con nuestro Rabb (Señor) y lo malo porque nos enseña a ser pacientes, perseverantes y fortalece nuestra iman:
“¡Es admirable el caso del creyente! Pues, todo asunto encierra un bien para él y esto no ocurre con otro que no sea creyente. Pues, si le llega la facilidad y es agradecido con Allah, hay un bien para él. Y si tiene paciencia ante la dificultad, también consigue un bien para él."
(Transmitido por Muslim)
Allah, subhana wa ta’ala (Glorificado y Exaltado sea), ha dicho que somos la mejor de las naciones:
“Sois la mejor de las naciones surgidas de entre las gentes…”
Surah Al Imran 3 Ayah 110
Hermana, deja a un lado la vergüenza, de ahora en adelante, cada vez que alguien te diga o haga algo porque eres musulmana, simplemente recuérdate a ti misma la verdad, estás en el camino recto por la bendición de Allah que puso la guía  en tu corazón y porque has usado tu razón antes de tomar la decisión más importante de tu existencia, someterte por voluntad propia a Dios, Uno y Único, así que, ¿quién está realmente en un error sino la persona que te ataca por tu fe? Pide a Allah en tu corazón por esa persona, para que abra su mente a la verdad y reciba la guía de Allah al Islam, y tú siéntete orgullosa de quién eres, una musulmana, sí, una musulmana que va por la vida con dignidad y autoestima, con la libertad de usar su velo en toda la tierra de Allah, una orgullosa musulmana en todo momento y lugar.


Autoría del artículo:
Este artículo ha sido escrito por "Islam Para La Mujer Hispanohablante"