Un beduino vino un día al Profeta, sallallahu allyhi wasallam (la paz y las bendiciones de Allah sean con él) y le dijo: “¡Oh, Mensajero de Allah!, he venido a ti a hacerte unas pocas preguntas sobre los asuntos de esta vida y de la última.”
“Pregunta lo que desees” dijo Rasulullah, sallallahu allayhi wasallam.
P: Me gustaría ser el más sabio de los hombres.
R: Teme a Allah, y serás el más sabio de los hombres.
P: Deseo ser el hombre más rico del mundo.
R: Estate satisfecho, y serás el más rico hombre en el mundo.
P: Me gustaría ser el hombre más justo.
R: Desea para los demás lo que deseas para ti mismo y serás el más justo de los hombres.
P: Quiero ser el mejor de los hombres.
R: Haz el bien a los demás y tú serás el mejor de los hombres.
P: Deseo ser el más favorecido por Allah.
R: Ocúpate mucho en alabar a Allah, y tú serás el más favorecido por Él.
P: Me gustaría completar mi fe.
R: Si tienes buenos modales tu completarás tu fe.
P: Deseo estar entre aquellos que hacen el bien.
R: Adora a Allah como si lo vieras. Si tú no lo ves, Él te ve. De esta forma tú estarás entre los que hacen el bien.
P: Deseo ser obediente a Allah.
R: Si tú cumples los mandamientos de Allah serás obediente.
P: Me gustaría estar libre de todos los pecados.
R: Báñate a ti mismo de las impurezas y tú estarás libre de todos los pecados.
P: Me gustaría ser resucitado en el Día del Juicio en la luz.
R: No hagas el mal a ti mismo ni a ninguna otra creatura y tú serás resucitado el día del Juicio en la luz.
P: Me gustaría que Allah me conceda su Misericordia.
R: Si tú tienes misericordia de ti mismo y de los demás, Allah te garantizará misericordia el día del Juicio.
P: Me gustaría que mis pecados fueran muy pocos.
R: Si tú buscas el perdón de Allah tanto como puedas, tus pecados serán muy pocos.
P: Me gustaría ser el hombre más honorable.
R: Si no te quejas de ninguna creatura, tú serás el más honorable de los hombres.
P: Me gustaría ser el más fuerte de los hombres.
R: Si pones tu confianza en Allah, serás el más fuerte de los hombres.
P: Me gustaría agrandar mi provisión.
R: Si te mantienes puro, Allah agrandará tu provisión.
P: Me gustaría ser amado por Allah y Su Mensajero.
R: Si tú amas lo que Allah y Su Mensajero aman, tú estarás entre sus amados.
P: Deseo estar a salvo de la ira de Allah el día del Juicio.
R: Si no pierdes la paciencia con ninguno de tus semejantes, estarás a salvo de la ira de Allah el día del Juicio.
P: Me gustaría que mis oraciones fueran respondidas.
R: Si evitas las acciones prohibidas, tus oraciones serán respondidas.
P: Me gustaría que Allah no me deshonre el día del Juicio.
R: Si guardas tu castidad, Allah no te deshonrará el día del Juicio.
P: Me gustaría que Allah me provea de una cubierta protectora el día del Juicio.
R: No descubras las faltas de tus semejantes, y Allah te proveerá de una cubierta protectora el día del Juicio.
P: ¿Qué me salvará de mis pecados?
R: Las lágrimas, la humildad y la enfermedad.
P: ¿Cuáles son las mejores obras ante los ojos de Allah?
R: Los modales gentiles, la modestia y la paciencia.
P: ¿Cuáles son los peores males ante los ojos de Allah?
R: El mal carácter y la avaricia.
P: ¿Qué calma la ira de Allah en esta vida y en la última?
R: La caridad oculta y la bondad a los familiares.
P: ¿Qué extingue el fuego del infierno el día del Juicio?
R: La paciencia en la adversidad y en las desgracias.
(Relatado por Iman Ahmad Ibn Hambal en su Musnad Imam Ahmad)
Fuente:
Artículo "Advice of the Prophet"
Origen:
Musnad Imam Ahmad
Publicado en inglés en:
Traducido del inglés al español por:
Islam Para La Mujer Hispanohablante
Cortesía de:
Yasmin
