A pesar de que el Ramadán ha terminado, todos tenemos que asegurarnos de que se queda con nosotros. Te preguntarás ¿cómo? Todos sabemos que Ramadan solamente dura un mes de 29 ó 30 maravillosos días. Este mes es un momento especial para acercarse a Allah subhana wa ta’ala (Glorificado y Exaltado Sea), física y mentalmente. Y tenemos que tener cuidado de no perder esa cercanía a Allah.
Sabemos que el Ramadán es un momento muy especial en nuestras vidas. Además de lo obvio, el ayuno desde el amanecer hasta la puesta del sol, también hay que abstenerse de muchas otras cosas. Un extra que viene con el ayuno es que realmente aprendemos a ser más amables con quienes nos rodean.
Puesto que nos esforzamos por fortalecer nuestros cuerpos con el poder tanto físico como mental que necesitamos para completar nuestros ayunos, vamos a tomar un paso más y hacer que dure todo el año. Se requiere de verdadera devoción a Allah ayunar sólo por su causa.
Existe un hadiz (narración) relatado por Sufyaan ibn ‘Abdallah, radiyallahu anhu (Que Allah esté complacido con él) quien dijo:
"¡Oh Mensajero de Allah!, dime algo sobre el Islam, que no puedo preguntar a nadie más que a ti." Él, sallallahu alayhi wasallam (La paz y las bendiciones de Allah sean con él), dijo: "Di: 'Yo creo en Allah' y luego sé firme (en esto)."
(Transmitido por Muslim)
Este hadiz es una prueba de que estamos obligados, después de tener fe en Allah, a ser firmes en la obediencia a Allah mediante la realización de los actos obligatorios y evitar los prohibidos.
Esto se consigue siguiendo el camino recto, que es el Islam. Si un musulmán vive el Ramadán y pasó sus días en ayuno y sus noches en oración y él se acostumbra a hacer actos de bien, entonces él debe mantenerse en esta obediencia a Allah en todo momento.
De hecho, la constancia después de Ramadán es el mayor signo de que uno ha obtenido beneficios del mes de Ramadán. Estos son los signos reales de un Ramadán exitoso. Además, las obras de un musulmán no llegan a su fin con el final del Ramadán. Por el contrario, deben continuarse y extenderse a todo el año.
Allah, subhana wa ta’ala (Glorificado y Exaltado sea Allah) dice en el Corán lo que traducido al español significa:
"Y adorad a vuestro Señor hasta que la certeza (de la muerte) venga a ti."
Surah 15 Al Hijr, Ayah 99
Cuando el ayuno obligatorio del Ramadán llega a su fin, el ayuno voluntario se puede realizar durante todo el año. Cuando la oración de la noche en Ramadán llega a su fin, el resto del año es un tiempo para seguir realizando también la oración de la noche. Y si el zakat ul Fitr llega a su fin al final de ramadán, queda todavía el zakat obligatorio anual que sigue siendo obligatorio, así como la caridad voluntaria que dura todo el año.
Esto es igual con respecto a recitar el Corán y reflexionar sobre su significado, así como todo otro acto de bien que se hacía en Ramadán, ya que estos se pueden realizar en todo momento durante el resto del año. Por lo tanto, el fervor que se sintió en Ramadán debe continuar durante todo el año.
Es lamentable que algunas personas realizan buenas obras sólo durante el Ramadán. Cumplen con sus cinco salat (oraciones) diarias, recitan el Corán, y dan caridad. Pero cuando Ramadán llega a su fin, dejan de continuar haciendo estos actos de adoración a Allah. A veces, incluso dejan de hacer los actos de adoración obligatorios por completo.
En verdad, hay mucha recompensa que Allah concede a su siervo en el ayuno de Ramadán.
Allah subhana wa ta’ala dice en el Corán lo que traducido al español significa:
"Allah quiere hacéroslo fácil y no difícil. ¡Completad el número señalado de días (de ayuno) y ensalzad a Alá por haberos dirigido! Quizás, así seáis agradecidos."
Surah 2 Al Baqarah, Ayah 185
Ramadán es un tiempo para corregir nuestra negligencia y malos actos y cambiarlos por buenas obras, esto debe seguirse practicando a lo largo del año. El primer paso es siempre difícil de tomar, pero el Ramadán es el momento de hacerlo. Así que después del Ramadán, puede que todos tratemos de seguir el ritmo de nuestra buenas obras, orando en el momento adecuado, haciendo los actos de adoración a Allah obligatorios y voluntarios, dando caridad a los menos afortunados, y siendo más pacientes y amables con los demás.
No seamos solamente musulmanes en Ramadan, seamos y obremos como musulmanes siempre, durante todo el año, durante toda nuestra vida inshaallah (si Allah quiere). La adoración a Allah debe ser continua, tanto con los actos específicos de adoración como el salat (oración) como con los actos cotidianos de trabajo, estudio, etc.
Que Allah subhana wa ta’ala derrame sus bendiciones sobre nosotros, perdone nuestros pecados y nos conceda a todos el Paraíso. ¡Amin!
Fuente:
Este artículo ha sido adaptado y traducido por “Islam Para La Mujer Hispanohablante”, y está basado en el artículo original:
“After Ramadan” (Después de Ramadán)
Origen:
The Islamic Bulletin
Publicado en: