5 oct 2011

Historia de Zahrah


Assalamu alaikum wa rahmatu Allah wa barakatu (La paz, las bendiciones y la misericordia de Allah estén con ustedes)

Bismilahi ar rahmani ar rahim (En el Nombre de Allah, El Misericordioso, el Compasivo)























































Mi nombre es Verónica Ibáñez F., en el Islam Zahrah, de 25 años, estudiante de Agronomía por egresar y de nacionalidad Chilena. Conocí el Islam hace casi cinco años y hace solo 1 año y 9 meses decidí regresar al Islam formalmente, es decir, dar mi shahadah (testimonio de fe) y ya no sentirme musulmana de nombre sino más bien practicante, Alhamdulillah (Alabado sea Allah). Se preguntarán ¿cómo conocí el Islam?, pues bien lo conocí por Internet ya que antes solo tenía una pequeña idea de lo que era, producto de lo que veía por televisión. 

Desde la infancia fui una niña que creció en un ambiente espiritual no muy bien definido pero espiritual al fin y al cabo, había una fuerte presencia religiosa en casa tanto por la influencia cristiana por lado de mi padre (abuelos sobre todo) y católica por parte de mi madre y aunque fui bautizada por la Iglesia católica a los 3 meses de edad, obviamente nadie me preguntó, ya sabéis, eso te lo dan tu padres como un regalo en cual te conviertes en hijo de Dios y fiel miembro de la Santa Iglesia Católica, si supieran qué mal hay en ello seguramente mucha gente dejaría de hacerlo. Bueno, a pesar de eso, me fui más por el lado de la religión cristiana, yo buscaba sentirme a gusto y segura de que estaba en lo correcto pero cada día era peor, iba de un lado a otro, un día desesperada por completar mis  sacramentos y otros por trabajar en alguna misión cristiana. 

Cada intento fracasaba ya fuera por el lado católico o por el lado cristiano, pasé casi 15 años buscando en esos dos lados cuál era el mío, pero siempre o no terminaba alguna charla o los grupos no lograban llenar las vacantes (esto cuando ya era adulta mayor de 18 años) para hacer primera comunión y confirmación de un zapatazo. Pasé noches enteras llorando y pidiendo a Dios encontrar el camino correcto y poder servirle y agradarle y me viene a la memoria una  ayah o aleya (versículo) del Corán:

اهدنا الصراط المستقيم

“Guíanos por el sendero recto.”

Surah al Fatiha 1 ayah 6

Si yo hubiera conocido ese versículo en ese momento, seguramente me hubiera hecho musulmana en el acto, pero Allah sabe mejor cómo hace las cosas. Pues bien, como decía, por Internet un día buscando material para un trabajo de religión para el colegio me topé con páginas del Islam, en ese momento me pareció interesante pero más nada.   

Luego,  en  el  año  2003,  entré  a  la  Universidad,   ésta  era  - y aún lo es - de ideología cristiana (ideología que opté por profesar, ya que se acercaba a lo que yo quería, sólo que no me convencía de la crucifixión de Jesús, no lo encontraba justo ni lógico, pues que para eso Dios mandaba mensajeros y profetas para dar mensajes, no era necesario que tuviera que morir alguien inocente) por lo tanto las materias bíblicas eran obligatorias. 

Mi primera materia se llamaba Panorama Bíblico y la profesora nos dio un trabajo sobre sectas y sus credos, y yo escogí Islam ignorando que está era una de las tres religiones Monoteístas (aunque en la práctica es la única que adora a un solo Dios sin socios ni copartícipes,  Alhamdulillah), la elegí por que ya había hecho algo relacionado, pero esta vez iba a ser más profundo y ¡lo fue eh!  A medida que avanzaba investigando me fui encontrando con cosas que me dejaban la piel de gallina, por ejemplo,  vi imágenes de una masjid (mezquita), me sorprendió mucho ya que me hizo recordar un sueño que tuve a los 15 años cuando me veía en un lugar amplio donde habían hombres a un lado y mujeres al otro, en ese tiempo  pensé que era alguna congregación pentecostal, pero ¡chachán! no habían asientos y al ver las fotografías de la masjid y cómo rezaban, más el leer que en el Islam no se permite la mezcla de género como una forma que tiene Allah para proteger a sus siervos y siervas de los deseos y pasiones en los corazones débiles, eso me dejó impactada.  Otra cosa, el velo que cubre a la mujer, yo acostumbraba a usarlo por moda subhanAllah (glorificado sea Allah), iba así a la universidad porque me agradaba alhamdulillah y esas cosas fueron animándome y me hicieron sentir que todo encajaba muy bien con mi forma de ser y cómo quería llevar mi vida.  

Llegado el momento de exponer mi tema en clases todos quedaron así callados y es que lo que yo les decía era muy distinto a lo que nos mostraba la televisión y claro porque hoy en día la moda es "lo que vende", no lo que entrega valores a la sociedad, entonces vale más mostrar sangre, belicismo y esas cosas. Como a todo quien terminaba de exponer su tema la profesora le preguntaba: ¿Tú serías musulmana?, ¿elegirías el Islam como tu Religión? y ¡paf! mi corazón se estremeció y en mi interior y así lo reflejé a los demás, dije InshAllah (Si Allah quiere)... ¡Allahu Akbar! (Allah es el Más Grande). Fue ahí donde me puse a leer más y quería conocer ya a alguien cuya religión fuera el Islam para preguntarle cosas y así empecé a ser musulmana en mi corazón. Alhamdulillah (Gracias a Allah), ese mismo año conocí una mujer musulmana, que Allah la bendiga, de la manera más sorprendente subhanAllah.  

Mi familia y yo acostumbrábamos a viajar a nuestra ciudad de origen como todos los veranos para vacaciones, ese día por unas actividades deportivas en la universidad no pude irme con ellos así que me fui al día siguiente con mi hermano en bus.  Al llegar al terminal de buses necesitaba ir por un clínex, ya que  el cambio de clima me había afectado y vi un lugar donde habían velos y cosas así, me dirigí hacia él y vi a la hermana, entonces hice la pregunta más estúpida ya que viéndola con el velo le pregunte ¿es usted musulmana?, a lo que ella respondió sí y amablemente me empezó a hablar del Islam.   Y así, cada vez que iba, pasaba a visitarla y hablábamos del Din (religión).  

Llegó el año 2004 y ese verano ella me regaló un librito nunca lo olvidaré, MashAllah (lo que quiere Allah), en el cual hablaba del testimonio de fe. Llegué a casa de mis abuelos, me di un baño para descansar luego del viaje, me puse a leer el libro y dije el testimonio de fe en mi corazón sola en la habitación y empecé a aprender cosas y a entender  que tenía que asumir y hacer formal mi decisión.  

Así fue, en el año 2008, decidí que no quería morir sin dar mi Testimonio de fe ante testigos y así se lo hice saber a la hermana, lo planeamos para el fin de semana siguiente pero se accidentó uno de sus nietos, así que tuve que volverme a casa, quedamos en otra fecha y tampoco se pudo, la tercera vez perdí el bus pero Alhamdulillah, el 17 de febrero del 2008 ya fue oficial, ese mismo día regresé a casa con mi Corán, mi ropa de rezar y el velo puesto. Mi madre me esperaba a la bajada del colectivo y me dijo: “¡qué bonita te ves cuando te pones el pañuelo! y ahí le dije: “bueno desde hoy, así me verás, ya puedo decir formalmente a todos que soy Musulmana ¡Alhamdulillah!” me abrazó y me felicitó. 

Alhamdulillah no tuve problemas al principio. Hoy como que a mi padre le cuesta un poco darse cuenta que esto no fue un capricho ni una moda que se me pasaría pero no me impide llevar mi fe alhamdulillah, sé que le molesta un poco o quizá bastante que venga vistiendo así, cubriéndome y mostrando sólo los ojos, pero es que si me quitan el Islam, ciertamente estarían quitándome la vida y Allahu Alim (Allah sabe más). Este es mi resumen de mi regreso al Islam.

ربنا لا تزغ قلوبنا بعد إذ هديتنا وهب لنا من لدنك رحمة إنك أنت الوهاب

ربنا إنك جامع الناس ليوم لا ريب فيه إن الله لا يخلف الميعاد

“¡Señor nuestro! No hagas que nuestros corazones se desvíen, después de habernos guiado. Concédenos Tu misericordia, Tú eres el Dadivoso.

¡Señor nuestro! Tú eres Quien reunirá a los hombres el Día sobre el cual no hay duda. Allah no falta jamás a Su promesa.”

Surah Al Imran